Las voces de las aves
resuenan sobre el oleaje,
hoy el mar es eco
de tan corto caos
Es costumbre
alzar la mirada
y contemplar
la algarabía del aire.
Júbilo que no me pertenece,
mas es mío el sosiego,
la calma de quien
reposa sobre su mirar.
De quien observa
como la tarde se duerme
bajo sus nubes grises.
Aquí, mi pluma y yo,
escuchamos
cómo se despide
el viento…
TatéGR
19-03-2017