Mar. Duna. Aire.
Sol sobre el caminante.
La voz sostiene la imagen.
Las letras se arrugan
entre papeles de nadie.
Todo este cuerpo
se sostiene breve,
ligero, serpenteante…
Y ahora, los nudos
(en la garganta)
que bailen,
que se desaten.
Este silencio
que se armoniza
entre lo dicho
y lo que no sabes.
Mar. Duna. Aire.
Ser caminante.
Taté GR
1 diciembre 2016
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