Mis dedos danzan
en el preciso instante
que ellos me hablan,
al unìsono de los latidos
del corazòn....
Asì la alegrìa se agranda
cuando el papel la abraza,
y el dolor se calma
en el vaivèn de las palabras...
Porque la soledad
encuentra su mejor compañìa
en un poema
y se vuelve aùn màs bella
cuando empieza a cantar...
Quizà, porque es una manera
de estar contigo mismo
y a eso no lo llamo soledad...
Porque la poesìa
es ese espejo
donde me veo
y me reconozco...
(Tatè)
No hay comentarios:
Publicar un comentario